Pensé que tenía aprendido eso de respetar las opiniones de los demás, pero me di cuenta que la práctica es otro rollo.
Entre licenciados las disputas se ponían buenas, más si eran entre abogados, los días a veces parecían interminables pues ¿Qué hace una ingeniera ahí entre ellos? Con un sistema muy diferente para aprender, con técnicas distintas de estudiar, con la idea de clases que se llevaban a cabo de otra manera ¡así no! Así no son las cosas ¡aaaaachhhh! ¡Qué fastidio!
Observar, analizar, suponer, encontrar la solución y resolver… ¡Si todo es tan fácil! Sigues algún método y ¡Ya! Bueno, eso creía yo.
Pero aprendí, aprendí muchísimo de ellos, de todos ellos, más de los que diferían conmigo. Estoy enormemente agradecida con la vida por haberme puesto en ese grupo 5, entre administradores, abogados, licenciados en comercio exterior, una economista y otro ingeniero en transporte colado como yo en el curso.
Entonces cierro el año muy contenta, llena de nuevas experiencias, con muchísimos nuevos conocimientos y un montón de amigos gracias al SAT.
VeLy Garza
3 comentarios:
Me apunto a ser nuevo por aquí.
Un saludo desde las tumbas de sal.
Paz
Amaveli, sólo paso para desear que el 2009 te llene la vida de belleza.
Gracias por pasarte por mi blog durante el 2008. Ojalá pueda enriquecerme con tu presencia en el 2009.
Es que de todo se aprende, querida, y a veces de lo que más aprendemos es de lo que más difiere de nosotros mismos.
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